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Flujo vaginal: ¿Qué tan normal o qué tan anormal es?

Son varios los beneficios que nos da el flujo vaginal (también llamado leucorrea): nos ayuda a prevenir infecciones ó combatirlas, brinda lubricación y también es una acción de limpieza y humectación. 

De acuerdo a MAYO CLINIC, la cantidad, el color y la consistencia de la secreción vaginal normal varían según la etapa del ciclo reproductivo. 

En muchas ocasiones el flujo vaginal es nuestra guía para saber si tenemos alguna infección vaginal o algo en nuestra salud no se encuentra del todo bien, pero ¿cómo saber si el flujo vaginal que tengo entra dentro de lo normal? La cantidad, su olor y su textura nos puede decir sobre ello. 

Acción de limpieza: nuestra vagina se auto limpia con ayuda de las secreciones vaginales

El flujo vaginal es una mezcla de células y fluidos de tu vagina y mucosa de tu cervix por lo cual, tener un flujo que no tiene algún aroma o alguna textura es totalmente normal ya que nos indica que nuestra vagina se está auto limpiando. 

Es normal tener diferentes tipos de flujo vaginal en cada etapa de tu ciclo menstrual

Las diferencias del flujo vaginal entre una fase y otra dentro del ciclo menstrual, son claras.

Durante la menstruación no encontrarás ningún flujo vaginal pero es probable que en los últimos días de tu menstruación presentes un flujo de color café.

En cuanto finaliza la menstruación es probable que tu vagina se encuentre reseca, ya que el estrógeno se eleva (el estrógeno es una hormona sexual femenina).

Al pasar los días tu secreción puede ir tomando una consistencia pegajosa o como de goma, en estos momentos el cuello de tu útero esta produciendo más liquido y su color puede ser blanco o incluso de un color amarillo. 

Cuando inicia la fase de ovulación el flujo vaginal toma una consistencia más húmeda, mas clara, es más resbaladizo y la cantidad de flujo que se presenta es mucho mayor. Este es tu momento más fértil.

Al terminar la ovulación, la vagina nuevamente muestra resequedad y la secreción vaginal vuelve a tornarse con una textura de goma y la cantidad disminuye.

Recuerda que esto es un estándar, sin embargo cada cuerpo es único y es muy probable que tu flujo vaginal tenga características diferentes, por lo cual es mejor acudir con tu ginecóloga (o) para que se cerciore de que tu flujo es normal o te ayude a detectar alguna anomalía.

Durante el embarazo las secreciones se presentan en mayor cantidad.

Nuestro cuerpo es tan magnífico e inteligente que durante el embarazo el flujo vaginal se presenta en mayor cantidad, ya que nos está ayudando a reducir el riesgo de infecciones vaginales y uterinas. 

En una presencia normal este flujo también debe ser claro y transparente o blanco e inoloro o con un olor muy sutil. 

El color, la consistencia y el olor del flujo vaginal nos puede decir mucho sobre la salud de la vagina

Debes prestar mucha atención al olor que expide tu flujo, a su color, su consistencia e incluso a la cantidad de secreción vaginal que estás presentando. 

Como te explicaba arriba el flujo va cambiando a lo largo del ciclo menstrual pero hay ciertas características que nos indican que la secreción que estamos presentando es anormal y puede ser algún síntoma de una infección vaginal por lo cual  necesitamos ir lo más pronto posible con nuestra ginecóloga(o)

Es momento de tomar cartas en el asunto cuando tu secreción vaginal es de color blanco grisaseo, amarillento o verdoso, su consistencia es espesa, grumoso o tiene una textura anormal, su olor es a pescado, fetido o ligeramente raro y ha amentado su volumen de manera significativa.  

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¿que tan normal o anormal es el flujo vaginal?